En este mundo hay vidas que parecen sacadas de una película. Existen innumerables casos de humildes trabajadores que acaban convirtiéndose en magnates, multimillonarios o personas influyentes que inspiran a jóvenes emprendedores a intentar buscar su lugar en el mundo. Un ejemplo digno de mención es el del creador de los juegos de casinos Novomatic, Johann Graf, quien antes de dar sus primeros pasos empresariales trabajaba como asalariado en una carnicería.
Cualquier persona que haya dedicado una mínima parte de su tiempo de ocio a los juegos de casino online se habrá topado con alguno de los productos de Novomatic antes o después. Esta empresa de éxito internacional es famosa por sus tragaperras y juegos de vídeo para casinos online, aunque como ya hemos dicho, Graf empezó su trayectoria profesional en una carnicería y más tarde creó una empresa de suministro de máquinas de pinball, oteando ya el horizonte de los juegos.
Conforme fue avanzando, su camino se fue centrando cada vez más en la industria de los casinos, llegando a obtener hasta el 70% del mercado de las máquinas tragaperras. Sin embargo, Novomatic dio un golpe sobre la mesa con la llegada de los casinos online, cuando se dio a conocer a nivel mundial.
Desde los orígenes más humildes
Hablar actualmente de Johann Graf es hablar de un empresario multimillonario procedente de Austria. Su patrimonio neto sobrepasa holgadamente los 7.000 millones de dólares, según los datos más recientes, lo que lo convierte en uno de los personajes austriacos más poderosos y ricos. El mayor aporte a esta fortuna ha venido de la mano del grupo de empresas conocido como Novomatic.
Esta organización opera en más de 40 países y exporta sus productos a más de 80. A su cargo figuran alrededor de unos 20.000 empleados y obtiene unos beneficios anuales de en torno a 4.500 millones de dólares. No obstante, no empecemos la casa por el tejado y hablemos sobre cómo llegó Johann Graf a convertirse en el hombre que es hoy en día.
Graf fue criado por sus abuelos en una casa humilde donde solo había una sola habitación. No contaban ni siquiera con agua corriente en su hogar y sus tutores legales tenían pensado un futuro muy diferente para el joven: hacerse cargo de la carnicería de la familia. Desde muy pequeño fue formado para dedicarse a vender carne hasta que, en 1974, comenzó a importar máquinas de pinball de América que cumplían los placeres de los clientes de cafés y pubs austriacos.
Después, no tardó en escalar posiciones dentro del ámbito del entretenimiento y firmó un contrato como agente de una empresa británica de máquinas tragaperras. Con la llegada de máquinas electrónicas, el austriaco vio la oportunidad de mejorar su servicio contratando a profesionales cualificados técnicamente para solventar las incidencias de sus clientes.
No fue hasta 1980 cuando amasó los ingresos suficientes como para fundar Novomatic Automatenhandels AG. Gracias a esta empresa, Graf introdujo la línea de máquinas recreativas “Admiral” en su país de nacimiento. Apenas un par de años después se introdujo en el mercado de Suiza y se siguió expandiendo. Su sello era la marca Admiral, que operaba en muchos casinos y a la vez también vendía video-póker, video-lotería, tragaperras y todo tipo de juegos de azar electrónicos y multijugador.
Un éxito tras otro
Johann Graf supo hacia dónde mirar en el momento adecuado. Era el momento de la innovación en la industria del juego y Graf supo perfectamente cómo y hacia dónde invertir su dinero. Su presencia en el sector de juego móvil y online y la aplicación de tecnología moderna en la gestión de casinos cada vez fue ascendiendo más notablemente.
Uno de estos avances fue el sistema modular myACP que permitió la supervisión y el control de la gestión de casinos a un nivel muy superior. Gracias a ello se pueden automatizar las funciones de juego como, por ejemplo, el seguimiento de pérdidas y ganancias, el rendimiento de las máquinas o la administración de premios gordos, entre muchas otras. Además, Novomatic también formo parte del desarrollo del sistema biométrico que garantizaba pagos seguros. Su primogénito Thomas se encarga del área de tecnología de la empresa y es parte del consejo administrativo. Novomatic cuenta con más de 1.200 salas de juego y apuestas deportivas alrededor del mundo y ostenta muchos casinos online.
Al margen de su faceta empresarial, Johann es un gran aficionado de automóviles clásicos y en su extensa colección se cuentan alrededor de 120, con una especial predilección por los Jaguar. Es un gran ejemplo de que, a veces, arriesgar puede salir muy bien si se hace con cabeza. Así lo demuestra su patrimonio de más de 7.000 millones de dólares que le posiciona en algún puesto cercano al número 300 de los mayores multimillonarios del mundo.